El 16 de febrero de 1835, una partida al mando
del capitán de milicias cordobés Santos Pérez emboscó el carruaje de
Facundo Quiroga en el paraje Barranca Yaco, en el norte de la provincia
de Córdoba. Quiroga se asomó con tono envalentonado (algo que le había dado
buen resultado en las batallas) por la ventana de la galera exclamando «¿Quién
manda a esta partida!»
siendo -como toda respuesta- muerto de un
tiro en un ojo por Santos Pérez. Su cuerpo fue luego tajeado y lanceado, y
todos los demás miembros de la comitiva fueron asesinados también. Entre ellos
se contaba su secretario, el ex gobernador de la provincia de San Luis, José Santos Ortiz y un niño.
A propósito del aniversario de su asesinato, el PROFESOR ARIEL LOPEZ, historiador y
vicepresidente del ATENEO DE ESTUDIOS E
INVESTIGACIONES HISTÓRICAS DEL DPTO. ARAUCO, comparte en nuestro blog un
artículo de su autoría: