Luis Eduardo Herrera - 20/12/2016
Hubo principio de
acuerdo entre el gobierno argentino y la CGT por el proyecto de
modificación al impuesto a las ganancias.
Lo positivo:
1) Nuevos mínimos
no imponibles, más elevados
2) Nueva escala, más
realista y gradual.
3) Se mantienen
deducciones que ya existían y se excluyen ciertas horas extras,
viáticos, aguinaldo (en algunos casos) y otros con límites
4) Se aplica un
índice de actualización salarial para actualizar montos
5) Se cambia el
nombre a “impuesto a los ingresos”, lo que refleja la realidad de
lo que se pretende gravar y zanja la cuestión de que “el salario
no es ganancia”.
Lo que falta:
1) Aumentar algunos
topes de deducción (por elemplo alquileres $4.000).
2) Permitir otras
deducciones demostrables, que además favorezcan las compras y
contrataciones en blanco y bancarizadas (gastos con tarjeta de
crédito y débito, matrículas profesionales, gastos en educación
con monto fijo, etc.)
3) Avanzar hacia una
liquidación más transparente para el contribuyentey
autodeterminativa, mediante web y/o aplicaciones móviles.
4) ¿El monotributo
soportará el costo fiscal del proyecto?
5) Siguen sin
discutirse impuestos distorsivos como el de débitos y créditos
bancarios y una baja en el IVA que permita abaratar productos para el
consumidor final.
Lo bueno:
1)¡Hubo acuerdo!
2) Entre un proyecto
inicial mezquino del oficialismo y uno irreal de la oposición, si se
aprueba este nuevo, privará la cordura.
A tener en cuenta
sobre qué se está discutiendo:
1) Sólo pagarían
el impuesto 1 millón de trabajadores de un total de 8; una minoría.
2) Bien aplicado, es
uno de los impuestos mas “justos” por su progresividad. Había
perdido esta característica por falta de adecuación a la realidad
(inflación y paritarias).
3) Es
coparticipable, por lo que las provincias reclamarán compensación
debido a la merma en los fondos que recibirán.
Más detalles: http://www.ignacioonline.com.ar/2016/12/las-claves-del-acuerdo-por-ganancias.html